El 18 de noviembre de 2011 salió “Talk that talk”, el sexto álbum de estudio de Rihanna. Con una mirada desafiante y tentadora, la cantante en la portada nos reta, nos invita a escuchar un álbum como ningún otro, atrevido y único… y esto sigue siendo verdad a más de diez años de su lanzamiento.
Desde las primeras líneas de “You da one” se nota la osadía con la que Rihanna llega a este nuevo álbum: no solo está llevando su voz hacia aquella mezcla del trap y el pop que dominaría la escena por años, sino que además se sienten los temas de romance y sexo que permearían el álbum y que lo convertirían en un hit inmediato. Eso sí, hay cosas que se mantienen igual, como su capacidad para borrar las fronteras entre el R&B, el hip hop y el house. Dos de sus éxitos son perfectos para fiestas de electrónica o para cantar de forma sentida en la ducha: “Where have you been” y su gran sencillo junto a Calvin Harris, “We found love”.
Breve y en ciertas maneras experimental, “Talk that talk” se siente en su formato como un mixtapes de la era dorada del hip hop. Esta es una artista que no tiene miedo a expresarse en este disco, desde canciones explícitas y divertidas como “Cockiness”, pasando por referencias al sonido de sus trabajos previos en “Watch n’ learn”, e incluso con una colaboración icónica en la canción que da nombre al álbum y que pone su sexualidad en el frente.
Sin miedo a mostrar sus pasiones y deseos en su música, Rihanna creó uno de los álbumes más icónicos de la década. “Talk that talk” es Rihanna y su sonido al desnudo.